sábado, 31 de mayo de 2008

Jazz para el alma


Four On Six-Pat Martino. En un día lluvioso como este viene bien escuchar a un guitarrista como este. Sin más que decir, ya se basta el solito.

viernes, 30 de mayo de 2008

Juegos de mi mente

Mi mente y yo tenemos extrañas relaciones. Leo algo y lo entiendo. Incluso lo releo y, ¡esta bien!. Si al cabo de unas horas vuelvo, eso mismo, es todo un hervidero nuevo. Mi mente juega consigo misma, y a mi me trae de cabeza. Y le digo: deja de engañarme, y me hace caso, si, durante un ratito, para volver a las andadas en cuanto me despisto. ¡Quieta!, le digo. Nada, erre que erre, otra vez al desvarío. ¿Y que puedo hacer yo con una mente tan atrevida y desobediente?. Pues dejarla, así se cansará, pienso. Ya, ya, me cansa a mi primero. Y entonces la pongo a trabajar, así al no tener tiempo, seguro que me dejará un ratito de sosiego. Pero, ¡ah ladina!, siempre encuentra el agujero. ¿Y cómo cierro yo ese agujero?. Nada, desconsuelo. Entonces me anima y me dice, ¡que no, que yo te quiero!. ¡No traidora, ya no te creo!. Y así acabamos yo en desconsuelo y ella en desafuero. Pero no cedo, no señor, será mi servidora, ¡ya lo creo!. Por fin he descubierto el truco. Que engañada me tenia, era amiga mía. Si no la inquieto, si no la despierto, ella me susurra al oído, bajito, bajito, pero cierto, y se me ilumina el entendimiento, ¡plaf!, ahí está, ya no hay desconsuelo.

jueves, 29 de mayo de 2008

¿Fundamentalista yo?

Hoy alguien a usado la palabra fundamentalista. Voy a crear una hipótesis.
Una de los significados de dicha palabra es el de: "exigencia intransigente de sometimiento a una doctrina o práctica establecida". Y en este, es en el que se basaba ese alguien para decir despropositos. ¿Cómo puedo llamar yo fundamentalista a nadie si propago constantemente ideas dogmáticas sobre lo que me interesa que siga como está?. Y ¿por qué tengo que usar el nombre de un grupo reducido de personas que viven su vida de otro modo? ¿Qué es lo que me molesta? ¿Por qué soy incapaz de no ver en mi, aquello que disfruto criticando en otros? Haciéndolo además desde una posición de superioridad. Y ¿por qué creo yo que soy superior? . ¿Un ego inflado en compensación por tener la sensación de inadecuación?. Sigamos discurriendo.
Acuso a lo demás de fundamentalistas, y no veo que yo soy un intolerante (antes era fascista), que me hago el sordo ante aquello que creo una amenaza a mis creencias. La pauta de "práctica establecida" se da en muchos ámbitos institucionalizados, pero no estoy interesado en verlo (sobre todo porque formo parte de esa institución) y porque ello me colocaría en una posición incomoda ante la necesidad que tengo de ser aceptado por los de mi mismo grupo y por ello no cuestiono en ningún momento si algo esta bien o mal, es así y basta. Y como no puedo con la incoherencia que esto me genera práctico el desprecio a los otros, acusándolos de fundamentalistas que me quieren cambiar, entonces me desahogo usando como chivo expiatorio a una minoría, "ellos son los malos, ellos son lo que quieren que las cosas no se muevan de donde están", es evidente que me recuerda de algun modo que yo no poseo la verdad absoluta. ¿Es posible esto?. No, no es posible, yo estoy del lado de los ganadores, así que si tengo que tener, por fuerza, la verdad de mi parte. ¿Entonces, quiero yo que haya cambios? ¿O prefiero seguir diciendo lo mismo aún a costa de caer en lo que acuso?. Este comportamiento tiene el nombre de gregarismo, cuya definición es: "dicho de una persona: que junto con otras, sigue ciegamente las ideas o iniciativas ajenas". Curiosa paradoja ¿verdad?.
En contraposición estaría la de una persona con criterio propio o individuado. Dicha persona ha soltado lastre suficiente para saber estar solo y vivir con los demás sin imponerse ni dejar que se le imponga ningún criterio ajeno a su libre albedrío.
Por lo tanto puedo pensar con plena libertad, y hablar desde la misma. No juzgo, sopeso, no desprecio, analizo, no tengo necesidad de confirmación ajena a lo que digo, digo y dejo decir, no insulto, comprendo, no impongo, comparto, no desprecio, aprecio. Y si tengo que decir no, es suficiente con un no, no tengo que inventarme una artimaña para que no se note que estoy disintiendo del criterio de los demás. Evidentemente esto me evita mentir, algo que me llevaría a una incomoda falta de libertad.
Llegar aquí puede suponer un esfuerzo arduo, más arduo cuanto más miedo tenga a quedarme solo o a ser engañado por quien me propone el cambio (no en vano he vivido mi vida con la necesidad de vivir arropado por otros).Y mucho más arduo cuanto más me niegue a ver que soy yo el que tiene un problema con el resto del mundo, no el resto del mundo conmigo.
Resultado de la hipótesis: miedo a la soledad. ¿Curioso verdad? El miedo es muy mal consejero, te hace ver fantasmas donde no los hay.

Cambio e inspiración

Hoy no estoy precisamente inspirada por eso voy a escribir a ver que sale sin inspiración. Iré poniendo palabras como estas que voy escribiendo sin ton ni son, que bueno, los dedos van por el teclado y siento que no necesito inspirarme en nada, el tiempo pasa y no me detengo, tengo tanto dentro, ya quite tanto de dentro, que para que necesito la inspiración, de la nada nada se crea, eso dijeron algunos y lo siguen diciendo después de muchos años otros, los que no tienen inspiración pero viven de ella. ¿Pero como se puede vivir de la inspiración si no se tiene inspiración?. Pues vendiéndose mucho o sea haciéndose presentes en ese aparato rectangular que como el ordenador, me permite seguir escribiendo a pesar de mi falta de inspiración, bueno ese aparato emboba mucho, y... Decae, decae,... Bueno, ¡ya está bien!, los cambios no salen de la nada, ¡contraparadoja!. Para saber o sentir algo, no hablo de conocer...,eso viene después, es preciso experimentarlo, experimentar todos los estados de animo, sentimientos, pensamientos, emociones, cada una de las activaciones mentales que tenemos. Eso mismo estoy haciendo yo ahora, dejar fluir mi mente, para, piensa, duda, arranca,y en todo ese va y viene esta lo importante, no necesita ser expresado, se sabe, ya está. Sólo se refleja hacia el exterior un algo muy particular que todos notan, pero que nadie palpa, claro palpar resultaría tangible. ¿Y como sabes que algo es realidad si no lo palpas?. ¿Desde dentro quizás?. ¿Y qué es ese desde adentro?. ¿Alma, Dios, Universo?. Palabras, palabras para rellenar el tiempo, falta de inspiración decía. O se entiende o no se entiende, no hay más.

Dentro y fuera

Desde la más remota antigüedad los sabios se han lanzado al abismo de la vida y la muerte, y se han arrojado a la pira de la ignorancia para ayudar a los demás. ¿Y tú? ¿Cuan profundamente te has adentrado?

Si comprendes eso, el fuego no podrá quemarte y el agua no te cubrírá. En caso contrario, mal podrás ayudarte a ti mismo y, en consecuencia, menos podrás ayudar a los demás.

Maestro Huanglong

miércoles, 28 de mayo de 2008

Pobreza igual a sabiduria

Hace bien poquito hablaba de la capacidad de algunas personas para deducir por si mismas conocimiento, asociándolo con situaciones de necesidad y pocos recursos, en este caso el tema que se trataba era el de la enseñanza en la universidad. Bien, pues hoy me encuentro con una noticia que me alegró la mañana. Una persona en el paro y con una hipoteca que no podía pagar, decide hacer algo al respecto, y seguro que no necesitó de mucho tiempo para tomar tal decisión, rifar el piso. Cada papeleta costará cinco euros, sacando para pagar, y con ganancia, la hipoteca, y si se queda con una papeleta y tiene suerte, hasta con el piso también. Creatividad.
Estamos tan inmersos en un mundo en el cual todo parece estar ofertado por alguien, que te quedas, engañosamente, inválido de recursos, cuando estos están siempre a tu alcance, dentro de ti. Saturados los sentidos con bombardeos constantes de "lo necesitas", se te hace difícil ver por donde puede aflorar esta capacidad innata de supervivencia, y todos la tenemos, todos. Nos cuentan demasiadas e inecesarias mentiras.
Los animales salvajes, no los de laboratorio, viven hacia adelante, el ser humano, y mucho me temo que también los animales de laboratorio, esperamos-esperan a ver que pasa, hasta que un acontecimiento inesperado quita las gafas de la ofuscación. Entonces la perspectiva del mundo se transforma totalmente, uno quiere responderle como siempre, pero es imposible, ya no hay marcha atrás. O caminas o te mueres. Por favor, no seamos como esos pobres animales de laboratorio, no lo somos, por suerte para nosotros. Es aquí donde aparece ese instinto innato, algo que estaba ensordecedoramente apagado por las sirenas sutilmente sordas de los peligros anunciados, los que te inculcaron y los que tú fuiste alimentando a base de frustraciones dolorosas, sin ver que precisamente éstas son las que te están dando la señal de que no haces algo bien. ¡Pero, Dios, cuánto tiempo puedes tardar en ver esto, cuánto!. Por eso mismo hoy se me alegró el alma, sabiendo de la vitalidad creativa de ese hombre, que no se derrumbó ante la apabullante insulsia del "debes pagar". Otra falacia más. Pero quedará para otro momento.

¿Quíen tiene razón?

En una de la etapas de mi vida, en cierta ocasión mi abuelo y yo discrepamos en algo. Habían comprado un reloj, era fabricado en Japon, y señalé que el cuatro en números romanos no se escribía con cuatro palotes. Rapidamente saltó mi abuelo: "¿qué vas a saber tú más que los japoneses?". Me quedé de piedra, yo me sabia poseedora de la verdad, pero era cuestionada por alguien con más autoridad que yo, que no conocimiento. A día de hoy me doy cuenta de que esa reacción tan furibunda de mi abuelo, no era sino la respuesta a un impulso interno, el de sentirse tonto ante una niña. Y mi reacción automática fue ponerme a la defensiva con la misma rapidez, diciendo que yo habia estudiado y que sabia más que él. Los dos queriamos tener razón, lo necesitabamos a toda costa, pero no nos dabamos cuenta de que así ninguno la tenia, aunque uno estubiera más acertado que otro. Cada cual tiene sus razónes para decir lo que dice, y en muchas ocasiones nos olvidamos de las formas, o sea asertividad (antes era educación), olvidando que lo importante es escuchar al otro. ¿Y que quiero decir con escuchar? Pues poner todos los sentidos en lo que el otro esta intentando decirme, escuchar con el alma, en vez de con la razón, puesto que la razón siempre quiere tener la sartén por el mango para demostrar que sabe más que nadie, o que no la engaña nadie. Esto me ha evitado un sinfin de situaciones incomodas, ya no pretendo tener razón, sólo entender al otro y hacerme entender por él. Ya no tengo miedo de que me puedan engañar o manipular , con lo cual tampoco tengo necesidad de engañar ni de manipular, viajando así mucho más ligera.
Por cierto sigo sin saber por qué los relojes con números romanos traen el cuatro con cuatro palotes.

martes, 27 de mayo de 2008

Tu tesoro

Mi maestro dijo: "Eres libre de utilizar a voluntad el tesoro inagotable que albergas en tu interior. No es necesario, por tanto que busques fuera de ti ".

Maestro Dazhu

Summertime



Un de los mejores temas de la historia del jazz, con la voz de Ella y la trompeta de Satchmo, magnifico, te llega al alma.
Related Posts with Thumbnails