Dos hombres habían compartido injusta prisión durante largo tiempo en donde recibieron todo tipo de maltratos y humillaciones. Una vez libres, volvieron a verse años después. Uno de ellos preguntó al otro:
-¿Alguna vez te acuerdas de los carceleros?
-No, gracias a Dios ya lo olvidé todo –contestó- ¿Y tú?
- Yo continúo odiándolos con todas mis fuerzas –respondió el otro.
Su amigo lo miró unos instantes. Luego dijo:
-Lo siento por ti. Si eso es así, significa que aún te tienen preso.
-¿Alguna vez te acuerdas de los carceleros?
-No, gracias a Dios ya lo olvidé todo –contestó- ¿Y tú?
- Yo continúo odiándolos con todas mis fuerzas –respondió el otro.
Su amigo lo miró unos instantes. Luego dijo:
-Lo siento por ti. Si eso es así, significa que aún te tienen preso.
Parece como que has vivido la experiencia, porque la reflexión es sumamente acertada.
ResponderEliminarMe encanta tu blog, si me lo permites lo seguiré asiduamente.
José María
seguramente el uno sigue preso de sus carceleros, pero el otro al olvidar, quizá haya olvidado también lo que aprendió en esa experiencia. Quizá el perdón sea mejor que el olvido.
ResponderEliminar¡Hola!josé maría: por supuesto que si, yo también lo he hecho, aunque no dejé ningun comentario por no tener mucho tiempo en ese momento. Me alegra que te guste, yo también uso esa palabra encantar, me encanta :)
ResponderEliminarSi que la he vivido...
Un cordial saludo
¡Hola!juan carlos: en mi aprendizaje comprobé que no hay el uno sin el otro. Una vez comprendes, perdonas, para luego olvidar, no necesariamente olvido de la experiencia, que es la que te da sabiduría, sino del dolor, que es lo que hace que se siga en el odio. Espero haberme explicado.
ResponderEliminarComprender, perdonar, olvidar, en este orden, así lo he experimentado yo.Dependiendo del grado de sufrimiento,se podrá olvidar mejor o más rapido, o no. Y depende de cada persona, como lo vivencie,si tiene tendencia a la positividad o a la negatividad, por la contrucción de su pasado y otras muchas cosas.
Un cordial saludo
Como siempre, certera y revitalizante.
ResponderEliminarUn abrazo.
Yo aprendí por experiencia propia que cuando dejé el odio a un lado, me liberé. Lo deberian practicar más quienes rompen con su pareja. Sentirán que lo han superado si dejan de odiar.
El odio hace que nuestro corazón se encuentre detrás de las rejas sin ver lo maravillosa que es la vida.
ResponderEliminarUn abrazo.
Juan Antonio
¡Hola!juan antonio:la mente, cronstructora de prisiones...
ResponderEliminarUn cariñoso abrazo
¡Hola!ego: disculpame, que te salté, te quedaste escondido :)
ResponderEliminarMuchas veces lo decimos, pero uno a de verlo por si mismo y en esos momentos estamos ofuscados por el dolor, así que paciencia, y herramientas para comprender y hacer comprender.
Me alegra que te sientas así de estimulado, pero recuerda que todo está en ti mismo :)
Un cariñoso abrazo
Certera historia, certera reflexión.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Hola!juan carlos: ¿verdad que si? Mucha menos carga; siempre, libertad...
ResponderEliminarUn abrazo
Hasta del peor carcelero se puede aprender algo. Me niego a guardar rencor.
ResponderEliminarTodo tiene su tiempo.
Saludos
una gran verdad tanto el odio, el miedo, a veces un amor mal interpetado nos escalava para toda la vida
ResponderEliminarsobre todo si llevamos ataduras de pasado al presente, seguimos siento presos
maginifico post
un enfrentaiento psicologico con el yo m nuestro yo
un abrazo
Veneno o prisión, mejor vacunarse al odio...
ResponderEliminarGran post!!!
¡Hola!checho: es cierto, todo tiene su tiempo y reflexión, y mejor caminar ligero de equipaje emocional... Fluir...
ResponderEliminarUn abrazo
¡Hola!piano huerfano: nuestros pensamientos alimentados por nuestras heridas emocionales, son los artifices de aquello que sentimos y por ello vivimos. El pasado es eso, pasado, aprender y liberarse, así es...
ResponderEliminarSaber mirar de otro modo en nosotros mismos y en el mundo, pero mejor sin efrentamiento, aceptando y comprendiendo...
Gracias, y bienvenida, me alegran tu visita y tus palabras :)
Un abrazo
¡Hola!gabi:gracias :), el alma universal me lo hizo encontrar para compartirlo, liberemosnos...
ResponderEliminarUn abrazo
Siempre me he preguntado, lo que sentirán los familiares de los fusilados, de los ejecutados, de los desaparecidos, incluso los supervivientes. ¿Podrán olvidar? ¿Podrán perdonar? Y los ejecutores, los desaparecedores, los que fusilan, los que con un simple decreto condenan a pueblos enteros. ¿Podrán ser olvidados?¿Podrán ser perdonados?
ResponderEliminar............................................
Una buena parábola
ResponderEliminarAbrazos
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¡Hola!:juan carlos: cuando hay dolor, este no puede ser medido por igual, personas que no han padecido casi ningún contratiempo en su vida se quejan y duelen por todo. Otras que si han vivido circunstancias atroces, por su alto nivel en el umbral del dolor, pasan por alto muchas de sus desgracias. Como ves nada es un no o un si. Hay grados y hay interpretaciones. Y todo ello depende de aquel que lo viva y que hace con lo que vive.
ResponderEliminarLo que yo aprendí es que el odio genera más odio, es una retroalimentación. Nunca caeré en la justificación porque sería un error por mi parte hacerlo, pero si que me ha ayudado a comprender que si yo odio, no veo claro, y al no ver claro también puedo caer en aquello de lo que acuso, o ya no tanto en lo que acuso sino en lo que no comprendo.Como la mayoría de las sociedades parten de principios equivocados, hacer borrón y cuenta nueva, no es posible, así que hay que ir poco a poco. Este poco a poco es ir introduciendo el concepto de educación emocional (y de aquí a la responsabilidad, a la empatía y por fin a la compasión, en definitiva, a lo que sería el concepto de individuación que ye he expresado alguna vez, para poder entonces entender que la anarquia es posible, puesto que ya eres responsable de ti mismo. Utopía, no es así ya para muchos que la vivimos interiormente, más que un concepto político es un concepto espiritual, para mi), si este que ahora se oye tanto hablar de él, pero del que nadie se acordó hasta que vieron el perjuicio que estaban causando. Cuando uno no tiene herramientas para poder hacerse entender, recurre a la violencia o al dominio, y ya en los extremos a la crueldad, acompañada de vileza. Conozco bien esta crueldad, hasta grados insospechados para la mayoría de los seres humanos y aplicada durante largos años, y aún así yo abogo por la no violencia y el perdón; pero antes, como ya decía, por la comprensión y la liberación del odio. En definitiva, ser más reflexivo (proactivo) y no agresivo (reactivo)
Entonces es cuando comprenderás al otro, por malo que sea lo que haya hecho, lo comprenderas y entonces podrás actuar desde esa comprensión; entonces ya no caeras en lo mismo que aquel al que estas juzgando, uso esta palabra porque hablo de tribunales. Cada uno en su fuero interno. El mejor camino que yo conozco es el de la aceptación, que no de la sumisión. Todos nos podemos sentir adalides en defensa de las injusticias, pero si caemos en lo mismo que aquellos a los que culpamos, entonces ya no hay justicia, y si venganza alimentada por el odio.
¿Podrán? Eso queda a cargo de cada uno. Si yo odio, estoy dandole al otro motivos para seguir actuando como lo hace. Defenderme si, pero aprendiendo como.
No sé juan carlos, este es un tema que por su extensión desarrollarlo aquí en un comentario me parece limitado. Esta mi correo electronico en el perfil, si te apetece seguir dialogando sobre ello, te invito, entonces podremos hacerlo más profunda y largamente.
Tú decides.
Un abrazo
¡hola!algial: apliquémosla pues...gracias :)
ResponderEliminarUn abrazo
claro que me apetece seguir dialogando, pero quizá sea un abuso, del tiempo que tenemos para otras personas ( en mi caso un hijo pequeño de 2 años )si la continuamos via e-mail, aquí el terreno es mas acotado y hay que dejar sitio a los demás.
ResponderEliminarSiempre ha sido un tema doloroso para mi, por la experiencia vivida en Argentina durante la dictadura, por los amigos desaparecidos, por los que zafamos, por las madres , abuelas e hijos que danzan solos, en busca de una mínima justicia. Cuando al final comprendes que la justicia no es para algunos sino para todos. Decía Borges que lo único que no existe es el olvido... Yo creo que lo que debe existir es la aceptación, de lo vivido sin odios, con la conciencia de lo vivido quizá haya lugar para la esperanza . La justicia es también perdón y reconciliación. El torturado no puede encontrar sosiego por la repetición en la memoria de lo vivido. El torturador no encuentra sosiego en el dolor infringido ( que también es daño a si mismo. Hace 1 mes un torturador se suicidó públicamente en Argentina, su infierno seguramente el peso del daño.
En fin esto da para mucho mas, pero básicamente estoy de acuerdo cntigo.
¡Hola!juan carlos: como ves estoy ahora mismo sólo con este espacio, no tanto por el tiempo (si uno quiere encuentra tiempo, sólo es cuestión de organizarse), es más bien por que me contamino mucho y necesito retiros, con lo que no siempre puedo visitaros como suelo hacerlo cuando estoy bien, y aquí me expreso más intimamente, me viene bien hacerlo, es terapeutico escribir...
ResponderEliminarY para hablar de mi pasado, prefiero hacerlo en un contexto más intimo, por eso mi invitación, pero comprendo; aún así me gustaría que pudieramos seguir conversando.Al universo se lo dejo, el es sabio,si :)
No comparto la frase de Borges, aunque tengo que decir que desconozco el contexto donde la expresó. En mi caso he comprobado que sí hay olvido y precisamente eso es lo que libera (tenemos apego hasta a nuestros sufrimientos, pensamos que esos sufrimientos somos nosotros y no vemos que eso son circunsatancias que nos hacen conocernos y conocer mejor a los otros) como ya dije, queda la sabiduría, esta es la te lleva a la aceptación y al perdón. Y de ahí a poder transmitir paz de espíritu, pudiendo conseguir entonces transformar también tu entorno. Estoy en ello :)
Un abrazo
yo si creo que no existe el olvido, o mas bien lo que existe es la memoria, hasta las piedras lo expresan. Incluso nosotros que acumulamos en nuestro ser toda la historia de la vida. nuestro cuerpo y nuestra alma no olvidan lo que fuimos, porque eternamente somos.Todo está cargado de memoria, memoria de las estrellas , del cosmos, de las partículas que nos componen, de la luz que nos conforma.
ResponderEliminar¡Hola!juan carlos: sé, si sé, lo puedo decir así abiertamente, que existe esa memoria de la que hablas, y de hecho comenezaré a poner textos relacionados con ello, como ya dije en su momento, para hablar de los chakras, los votices de energía. Pero esto no es el olvido del que hablamos cuando hablamos de liberarse de la carcel del odio o el sufrimiento.
ResponderEliminarEjerzo dos profesiones, que relaciono entre sí pues las dos tratan de conocer y ayudar a comprenderse, una de ellas es practitioner o terapeuta de flore de Bach, aunque no sólo use de ellas. Las dos son vocacionales, y que con mi bagaje pienso que no podría hacer otra cosa, todo me fue encaminando poco a poco hacia estas dos foramas de entender al ser humano,y también al budismo y luego al zen... ves como tu camino está dibujado, pero al venir aquí, venimos olividados, luego nos pueden ayudar para encontrar de nuevo a que vinimos aquí. ¿A ti te ha pasado así? La sincronicidad es la herramienta que nos despierta, así la vemos muchos...
Y si somos todo eso, más todo lo que aquí aprendemos para poder transformar lo que el universo quiere. Pero las palabras, como siempre se quedan cortas. Esa belleza está dentro, y la expresamos hacia afuera, porque también está fuera, por eso digo que sé... y sé también que me entiendes :)
Un abrazo